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SAKHIR, BAHRÉIN.- El dos veces campeón mundial Sebastian Vettel (monarca vigente) contuvo a Kimi Raikkonen y triunfó ayer en el Gran Premio de Bahréin de la Fórmula Uno, en una competencia sin incidentes y en la primera victoria del alemán de la temporada.

De ese modo, el piloto de Red Bull llegó a los 53 puntos y se adjudicó el liderato del campeonato de pilotos tras cuatro semanas en manos del piloto de McLaren Lewis Hamilton, quien quedó octavo y tiene 49 unidades. Además, Red Bull también superó a McLaren en la clasificación de los constructores.

Vettel comenzó desde la pole por primera vez este año y fue líder de principio a fin. Raikkonen arrancó desde el undécimo lugar de la parrilla y terminó 3,3 segundos atrás, en su primer ascenso al podio desde que regresó al deporte esta temporada.

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Romain Grosjean, del equipo Lotus de Raikkonen, quedó en tercero seguido por Mark Webber, de la escudería Red Bull de Vettel. El mexicano Sergio Pérez finalizó en el undécimo puesto.

La competencia, que fue cancelada el año pasado, estuvo ensombrecida la mayor parte de esta semana por enfrentamientos entre policías antimotines y manifestantes opositores al Gobierno en esta dividida nación. Sin embargo, la carrera se realizó sin contratiempos.

Los puestos de seguridad se reforzaron antes de la carrera y el domingo no hubo señales de protestas cerca del circuito.

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"Fue una carrera increíble", dijo Vettel, quien alzó el puño cuando cruzaba la línea de meta. "Tuvimos un muy buen comienzo que fue crucial. Pude separarme del resto y resultó ser una gran ventaja", agregó el alemán.

Aunque fue un día histórico para Raikkonen después de ausentarse dos años de competencias de Fórmula Uno, dejó pasar varias oportunidades que le hubieran dado el triunfo. Retrocedió un sitio por una mala salida y luego batalló para dejar en segundo lugar a Grosjean. Una vez que estuvo en el segundo, el finlandés logró cerrar la brecha con Vettel a menos de un segundo después de 34 vueltas. Pero solo hizo un intento serio para rebasar al alemán después de eso y fracasó.