Mientras avanzaba en la tarde de este 9 de marzo, junto a decenas de indígenas, a la altura de la cascada Velo de Novia, ubicada a 20 kilómetros del cantón Zamora (en la vía que conduce a Loja) Salvador Quishpe, prefecto de Zamora Chinchipe y uno de los líderes de la movilización indígena iniciada el pasado 8 de marzo, relata cómo un piquete de policías intenta detener los vehículos que acompañan a los marchantes. “No tienen argumento porque los carros son de propiedad privada y tienen sus documentos en regla”, dice. Quishpe cuestiona los obstáculos que se han puesto a esta movilización denominada Por el Agua, la Vida y la Dignidad de los Pueblos. Dice que el Gobierno hace lo que le da la gana, pues su contramarcha sí pudo disponer de buses para movilizarse.