Ante todo soy madre. Por eso también quise salir del Ecuador. Uno de mis temores era que mis hijos estuvieran en el ojo del huracán, que los compañeros los señalaran y que empezaran a preguntar cosas que a la edad de ellos resultan muchas veces incomprensibles”. Lo dice Mónica Encalada Villamagua, la exjueza y ahora huésped de Bogotá, al explicar las razones que la llevaron a denunciar las presiones de los abogados del presidente ecuatoriano Rafael Correa, que afirma haber sufrido al atender el caso EL UNIVERSO.