AGENCIAS
BARCELONA, España.- El Barcelona clasificó, en un partido vibrante, para las semifinales de la Copa del Rey, tras empatar a 2 como anfitrión con Real Madid ayer en el estadio Nou Camp en cuartos de final de vuelta (global 4-3).

Los goles los anotaron en el primer tiempo el canario Pedro (43 minutos) y el brasileño Dani Alves (45m); para los capitalinos lo hicieron en el segundo el portugués Cristiano Ronaldo (68m) y el francés Karim Benzema (72m).

El encuentro respondió a las expectativas. Al principio dominó el Barça, pero el Real Madrid, hasta ayer campeón vigente de la segunda competición española en importancia, no se amilanó.

Publicidad

La mejor versión del Madrid en el repertorio de clásicos de estos últimos años no tuvo su premio, que cayó en manos de un Barcelona irreconocible, que desperdició una ventaja de 2-0 y acabó sufriendo lo impensable hasta el final del partido.

(Tomado de YouTube)

"Esta es la versión del Real Madrid que más problemas nos crea. Presionan muchísimo y nos crean muchas dificultades. No esperábamos menos. Hay que saber sufrir. Jugamos ante un gran equipo. Aguantamos y salimos adelante", dijo Alves.

Publicidad

El Barça halló sus mejores momentos en la recta final de la primera parte, cuando la magia le llegó a los pies de Lionel Messi. El argentino ejecutó una de sus clásicas escapadas, entregó el balón a Pedro, quien entró por el lesionado Iniesta, y colocó el balón a la derecha de Iker Casillas (43m).

Con el segundo gol parecía que el duelo estaba liquidado (minuto 45m). Tras un rechazo de la zaga madridista el brasileño Dani Alves fusiló a Casillas con un violento zapatazo desde fuera del área.

Publicidad

Avanzado el segundo tiempo llegó la emoción. Después de un gol anulado a Sergio Ramos, el alemán Mesut Ozil pasó el balón a Cristiano Ronaldo, quien mostró un chispazo de su clase y eludió a José Pinto para descontar (68m).

El compromiso se puso al rojo vivo muy poco después, cuando tras una jugada de lujo y una definición con categoría, Benzema puso el empate a 2 (72m).

El cuadro merengue cedió así su corona en la competición que ganó el año pasado, precisamente contra el Barça en la final, el único triunfo del Madrid de Mourinho contra el conjunto de Pep Guardiola.