QUITO
.- Deportivo Cuenca continúa en la capital para cumplir con la etapa final de su pretemporada. El cuadro morlaco se aloja en las instalaciones de la Casa de la Selección, en donde los dirigidos por el argentino Luis Soler cumplirán con un total de cuatro juegos comprobatorios hasta el próximo miércoles, cuando retornarán a Cuenca.

En su preparación, Soler considera que el mantener una base de 18 jugadores de la temporada anterior es la principal fortaleza del club. Al equipo, que ocupó el sexto lugar del torneo 2011, la directiva sumó al guardameta argentino Marcelo Ojeda y al centrocampista paraguayo Miguel Paniagua, además de los nacionales Edder Fuertes, Byron Cano, Mike Rodríguez y Walter Chalá.

"Esta temporada podemos presentar un equipo más fuerte porque al inicio del 2011 se cambió gran parte del plantel. Esta vez es distinto porque contamos con una base de futbolistas bien trabajada, si bien con muchos juveniles, pero es un equipo más competitivo", explicó el DT morlaco.

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Centrados exclusivamente en lo futbolístico, Cuenca tuvo el miércoles pasado como primer rival a Universidad Católica, cuadro al que enfrentó en dos partidos de 50 minutos, con una balance favorable para los dirigidos por Soler.

En el primer juego, los camaratas se adelantaron en el marcador con anotación de Víctor Estupiñán, mientras Roberto Valarezo igualó para los colorados en el complemento. En el segundo compromiso brillaron el volante Fernando Fajardo y el delantero argentino Federico Laurito, que con dos anotaciones cada uno, dieron el triunfo 4-1 a los morlacos; descontó Alexis Chalá.

"Los partidos que tenemos planificados son muy importantes para nosotros. Nuestro viaje a Quito es únicamente para ganar ritmo de juego porque en Cuenca no tenemos equipos con quienes competir", señaló Soler, que considera suficiente a esta serie de amistosos para llegar a punto al torneo.