Buenos Aires
AP.- El gobierno dispuso el jueves el envío de una treintena de policías a custodiar un hospital público que en la víspera fue escenario de graves incidentes protagonizados por un grupo de barras bravas del club Nueva Chicago que quisieron ajusticiar al supuesto asesino de una facción rival.

La ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré, anunció en su cuenta oficial de Twitter que "por requerimiento de la Justicia" destinó al hospital Santojanni de esta capital a dos unidades de contención con 22 efectivos de la policía Federal, otros cinco alrededor del edificio y un grupo de combate integrado por otros nueve policías.

En tanto que otros dos policías custodiarán al ciudadano paraguayo Aldo Barralda, quien el miércoles por la tarde ingresó al hospital con una herida de arma blanca que sufrió durante un enfrentamiento entre barras bravas en la sede de Nueva Chicago, club de la segunda división del fútbol argentino que se ubica en el barrio de Mataderos.

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En esa pelea desatada por el control de la tribuna fue asesinado Agustín Rodríguez, miembro de una facción opuesta a la de Barralda.

Los compañeros de Rodríguez quisieron vengar su muerte y enterados de que Barralda estaba internado en el Santojanni salieron a buscarlo, aprovechando que ese hospital público, como otros de la capital, vieron reducida la presencia de policías desde principios del año pasado por decisión del gobierno.

No está clara aún la responsabilidad de Barralda en el crimen de Rodríguez, asesinado por un golpe de un fierro en la cabeza.

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Según imágenes de las cámaras de seguridad del hospital, una decena de barras bravas ingresaron al lugar con palos y accedieron hasta la sala de guardia, donde se encontraba Barralda y lo apuñalaron en el abdomen, pero logró escapar.

Barralda se encuentra internado y fuera de peligro.

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La barra brava de Nueva Chicago está dividida entre un grupo denominado "Los Perales", quienes históricamente controlaron la tribuna, y otro llamado "Las Antenas", que le salió a disputar el poder en el 2008.

En estos años hubo varios enfrentamientos con heridos, pero hasta aquí ninguno había terminado en muerte.

El presidente de Chicago, Antonio Fusca, solicitó licencia por tiempo indeterminado luego de que medios locales difundieran un audio en el cual aparece dialogando con los integrantes de "Los Perales" justo antes de desdencadenarse la pelea con el otro grupo.