La despedida oficial, el pasado lunes, fue triste para Pablo Lugüercio al marcharse de Racing. “Les dejo un abrazo enorme. Muchísimas gracias por todo, por confiar en mí; los quiero a todos. Ojalá que en Barcelona sean un cuarto de lo que son ustedes (los aficionados) acá. La decisión de irme es por mi futuro y el de mi familia”, publicó el futbolista en una de las páginas web de su exequipo.