AP
LONDRES.- Todavía frescos los incidentes que involucraron al uruguayo Luis Suárez y a John Terry, el fútbol inglés enfrenta otro posible caso de racismo luego que un jugador negro fue conmovido hasta las lágrimas por los insultos de un aficionado durante un partido de la Copa de la FA.

El sábado, un día después del partido, la policía de Merseyside arrestó a un hombre de 20 años de la localidad de Aintree, bajo sospecha de una contravención al orden público agravada por racismo.

Además, los investigadores se alistaban para entrevistar al defensor del Oldham Tom Adeyemi, quien tuvo que ser tranquilizado por compañeros y adversarios el viernes en la parte final del encuentro contra Liverpool.

Publicidad

El ex defensor del Oldham Reuben Hazell respaldó la denuncia de Adeyemi después de hablar con él.

"Fui al vestuario del Oldham para hablar con mis ex compañeros y hablé personalmente con Tom Adeyemi sobre lo que sucedió en el altercado con el aficionado", dijo Hazell en Twitter. "Dijo que fue insultado racialmente por el aficionado. Esto es un Hecho".

El capitán del Oldham, Dean Furman, apremió a las autoridades a tomar una "dura acción" contra el responsable.

Publicidad

"Lo que pasó no debería pasar en este deporte", dijo Furman a la radio BBC. "Esto ha sido destacado en los últimos meses y es una absoluta vergüenza".

Furman se refería a los incidentes relacionados con Suárez, delantero uruguayo del Liverpool, y Terry, capitán de Inglaterra y de Chelsea, que han colocado el racismo entre los temas principales en la agenda del fútbol inglés.

Publicidad

Suárez fue suspendido por ocho encuentros y multado con 62.000 dólares por decirle "negro" al defensor Patrice Evra del Manchester United en siete ocasiones en un encuentro en octubre.

El cañonero uruguayo pidió disculpas el miércoles pero sigue negando que su conducta haya sido racista. Pese a las críticas generalizadas, Liverpool causó más polémica al apoyar a su jugador antes y después del veredicto.

El entrenador Kenny Dalglish sigue enojado por el fallo y el club asegura que la acusación de Evra no fue corroborada.

Terry, cuyo caso todavía está pendiente, enfrenta cargos penales por sus presuntos insultos racistas hacia el zaguero de Queens Park Rangers Anton Ferdinand durante un partido de la liga inglesa el 23 de octubre.

Publicidad

Terry niega la acusación, pero comparecerá en una corte el 1 de febrero.