El pesista David Arroyo, de Orellana, tiene ya 20 años. Está en la etapa de transición de juvenil a sénior, pero aún expresa su alegría como un niño. Por eso, el pasado miércoles, al ser nombrado como ganador de la Cena de Campeones 2011 de Diario EL UNIVERSO evidenció emoción y también sorpresa.

Arroyo, campeón mundial juvenil y medallista de oro en los Juegos Panamericanos 2011, confesó que no esperaba ser nombrado como el mejor deportista del año.

“Me tomó por sorpresa, ya que hay otros deportistas de buen nivel. Esperaba que fuera otro, pero gracias a Dios se dio la oportunidad de llevarme este premio, que me motiva mucho para seguir esforzándome y obtener incentivos como este”, manifestó Arroyo sin abandonar su espontánea sonrisa.

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Durante el audiovisual que rememoraba cada uno de los triunfos de los 38 deportistas destacados en la Cena de Campeones, Arroyo reía, se emocionaba y hasta se ruborizó cuando se oyó dar sus impresiones sobre el triunfo en los 91 kilogramos en Guadalajara 2011, donde ganó tres de oro en envión, arranque y total.

Pero la impresión en su rostro y gestos corporales fue más emotiva cuando escuchó que su nombre era exaltado como el merecedor del trofeo de la Cena de Campeones.

“Son competencias muy importantes, me he esforzado tanto, me he sacrificado tanto y cada campeonato que haga, hasta el más mínimo, vale mucho para mí. Es una experiencia más de seguridad y sabiduría. Siempre quiero dar mucho más para superarme”, dijo el joven levantador al intentar explicar la emoción que sintió esa noche.

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Pero las palabras de Arroyo también evidenciaron que está madurando. De hecho, este es su último año como competidor juvenil, a partir del 2012 participará en torneos séniors.

Con la ilusión de Londres
Apenas se involucre en la etapa sénior y ya desde ahora, Arroyo se plantea su meta: clasificar a los Olímpicos de Londres 2012. “Me voy (ayer) a Buenos Aires, Argentina, a mi último campeonato juvenil porque ya comienzo a nivel sénior. El próximo año son muchos torneos y muy fuertes porque son clasificatorios a los Juegos Olímpicos”, indicó Arroyo, quien aclaró que “hay una o dos opciones, pero no solo depende de mí, sino de todo el equipo”.

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Y si cumple la meta de la clasificación, el pesista amazónico quisiera emular a sus referentes, la medallista mundial Alexandra Escobar y el campeón olímpico Jefferson Pérez. “Yo veo a ellos como un espejo. Ellos han hecho tanto y nunca se han rendido. Son un gran ejemplo para nosotros que estamos comenzando”.

Triunfador: Emociones
David Arroyo
PESISTA ECUATORIANO
“Desde niño he sido alegre, y en cada torneo, compita mal o bien, como siempre digo: a lo peor una buena sonrisa”.

“En el Preolímpico en Guatemala (2012) la clasificación (uno o dos cupos a Juegos Olímpicos) depende de todo el equipo, no solo de uno”.