AFP
MONTEVIDEO.- La selección de fútbol de Uruguay se prepara para su debut el viernes ante Bolivia en las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de Brasil 2014 con una luz de alerta sobre si podrá contar con sus estelares delanteros Luis Suárez y Edinson Cavani, ambos en duda.

El combinado charrúa entrenaba a puertas cerradas el miércoles por la tarde en el Complejo Celeste, en las afueras de Montevideo, donde quedará luego concentrado hasta el choque en la tarde del viernes frente al once del Altiplano en el Estadio Centenario.

"No creo que haya sorpresas, pero recién el jueves vamos a tener una idea de cuál va a ser el equipo", indicó el martes por la noche el entrenador Oscar Tabárez en su último contacto con la prensa hasta el choque frente a Bolivia.

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Cavani y Suárez en duda
El DT estudia distintas posibilidades para conformar la oncena titular, ya que la opción de jugar con tres delanteros depende de la inclusión de Cavani, ha indicado Tabárez en varias oportunidades.

El delantero del Nápoles sufrió un esquince en el tobillo derecho la semana pasada ante el español Villarreal por la Liga de Campeones europea y por eso no jugó el fin de semana en la Liga italiana con su equipo.

"Cavani respondió bien a las nuevas exigencias, eso es alentador", dijo Tabárez, mientras que el jugador aseguró que tenía "ganas de llegar" al choque con Bolivia.

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Pero quien se convirtió en la gran incertidumbre en las últimas horas fue Luis Suárez, elegido mejor jugador de la Copa América de Argentina-2011, que sintió un dolor en el muslo en la práctica del lunes.

"Tenemos algunos días por delante pero hoy está en duda", dijo el entrenador de la celeste.

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En caso de que Suárez no pueda estar a la orden de Tabárez, Diego Forlán jugaría acompañado de Abel Hernández (Palermo, Italia) en el ataque.

El lugar de Cavani, en tanto, sería ocupado por Álvaro González, del Lazio de Italia.

Niegan favoritismo
Los jugadores, en tanto, han tratado de sacarse el cartel de favoritos para las eliminatorias sudamericanas, que conceden cuatro cupos para el Mundial de Brasil 2014 y al quinto la posiblidad de una repesca contra el quinto de Asia.

"Más allá de un título (de la Copa América), se ganó muchísimo por toda la ilusión que se generó, por toda la alegría, toda esta euforia que aún hoy sigue vigente", dijo el defensa Diego Godín, que milita en el Atlético de Madrid.

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"Y también ganamos en respeto, las otras selecciones conocen nuestro potencial. Y por el contrario, todos van a querer ganarle al campeón", aseguró, indicando que está ansioso por poder jugar, ya que una lesión lo dejó fuera de casi toda la Copa América.

"El Maestro (Tabárez) nos dijo que tenemos que pensar en el partido, descansar, respetar al rival y, después, estar ajenos a la euforia. Nosotros tenemos que estar centrados en lo que viene, que es otra historia", aseguró Godín.

"No nos sentimos favoritos", indicó por su parte el veterano delantero Sebastián Abreu. "El favoritismo te puede traicionar o confundir. Vamos a ser protagonistas. Favoritos no", aseguró el atacante del Botafogo de Brasil.

Si bien la expectativa para ver al campeón de América es alta en el país, hasta ahora solo se vendieron aproximadamente 15.000 entradas, de las 54.000 a la venta, en medio de quejas por el precio de las entradas populares, que cuestan unos veinte dólares.