AP-EFE
ROMA.- El alemán Sebastian Vettel (Red Bull) dejó sentenciado el mundial de Fórmula 1, que podría obtener matemáticamente en dos semanas en Singapur, al ganar ayer el Gran Premio de Italia, después de resistir un audaz embate de Fernando Alonso, que concluyó tercero.

Vettel, que el año pasado se convirtió en el piloto más joven de la historia en ganar el mundial, será con 24 años el bicampeón más joven de F1, tras ganar en el circuito de Monza, llamado catedral de la velocidad, su octava victoria de la temporada.

Con velocidades promedio de 250 kilómetros por hora y máximas de 340 km, Monza es el circuito más veloz del calendario de F1.

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Vettel ganó en el 2008, con 21 años con Toro Rosso.

"Fue muy emotivo ver a toda esa gente vitoreando y corriendo", dijo Vettel. "Significa mucho para mí y cuando crucé la meta recordé cada momento. Esta carrera es el mejor podio, lo único que pudiera ser mejor en este momento sería lucir un traje rojo", añadió el alemán, revelando el deseo de que algún día pueda estar al volante de un Ferrari.

El británico Jenson Button (McLaren) superó sobre el final a Alonso (Ferrari) para terminar segundo y el español quedó tercero.

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Lewis Hamilton (McLaren) finalizó cuarto, seguido por el alemán Michael Schumacher (Mercedes), cinco veces ganador en Monza. Felipe Massa (Ferrari) entró sexto. El brasileño Bruno Senna (Renault), sobrino del legendario Ayrton Senna, finalizó noveno, para sumar sus primeros puntos en F1.