Desde el punto de vista futbolístico el Club Sport Emelec tocó fondo en el primer tiempo de su partido contra Espoli.

Desde hace algunos años no se había visto a Emelec jugar tan mal, sobre todo contra uno de los equipos más deficientes del campeonato; la tabla de posiciones así lo indica.

Las estadísticas son claras: en el tiempo inicial Espoli realizó seis saques de esquina, mientras que Emelec ninguno. La policía dispuso de disparos en los palos, ataques a fondo y hubo buenas atajadas de Wilmer Zumba. No marcó goles porque sus delanteros reflejan con claridad la posición del equipo en la tabla. Mientras que Emelec, prácticamente no llegó a la portería contraria.

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¿Por qué sucede esto? Emelec fue ante Espoli, el pasado miércoles, un equipo con poca posesión de balón, y cuando lo tuvo, lo perdió muy rápido. Sus mediocampistas tienen que correr mucho hacia su propio arco, y poco hacia la valla contraria. Corren más para atrás que para adelante.

Emelec es un equipo largo y ancho, existen demasiados espacios entre sus líneas. No es un equipo compacto. ¡No es un equipo! Es solo la sumatoria de un grupo de buenos futbolistas dispuestos en la cancha con dos simples consignas: intentar meter la pelota en el arco adversario -sin la idea clara de cómo hacerlo- y evitar que le metan el balón en su propia puerta.

Personalmente siento una gran decepción, ya que al traer la dirigencia eléctrica a un entrenador campeón en el fútbol uruguayo, con un buen cartel, uno espera que deje para el fútbol de nuestro país enseñanzas desde el punto de vista táctico, físico, en el manejo de grupo, y otros aspectos, como lo han hecho algunos buenos entrenadores foráneos que han venido.

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En el caso de Juan Ramón Carrasco, hasta la fecha, nos muestra un fútbol primario, muy básico. ¡Los defensas defienden, los delanteros atacan!, explica con un discurso lleno de mentiras y charlatanerías.

“El balón se hace de cuero, el cuero sale de la vaca, la vaca come pasto, etc.”, dice en sus arengas el uruguayo. Alguien le ha dicho a Carrasco que los balones ya son de material sintético y que en Ecuador la gente no es tonta ¿O él cree que sí?

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Emelec mejoró el segundo tiempo contra Espoli. ¿Por qué? ¿Los cambios fueron acertados? Sí, pero ¿por qué estos futbolistas no entraron desde el principio? ¿Por qué tantas pruebas, tantos experimentos?

Yo vi algo de irreverencia y de desobediencia táctica en algunos jugadores de Emelec, caso Óscar Bagüí, Fernando Gaibor, Gabriel Achilier, incluso Marcelo Fleitas, que se lanzaban al ataque cuando sabemos que la orden de Carrasco es que los laterales no pasen.

No nos extrañe que el próximo partido (mañana, con Liga de Loja) Bagüí o alguno de los nombrados no estén entre los convocados, pese a que el primer gol fue una muy buena jugada de Marco Caicedo con un buen pase de Bagüí. Felicitaciones, pero probablemente no vuelvan a jugar; a menos que esta columna sirva para algo.

* Director técnico ecuatoriano graduado en la escuela de entrenadores de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA). Técnico deportivo y entrenador nivel II, por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Profesor de Alto Rendimiento Deportivo. Técnico en Preparación Física.

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