Emelec sufrió ayer su segunda derrota consecutiva en la capital bajo el mando del técnico uruguayo Juan Ramón Carrasco (antes perdió con Liga de Quito 1-0), al permitir que El Nacional se reponga de un marcador adverso. Así, los militares pusieron fin a una racha de dos pérdidas al hilo al ganar 2-1.

Con el trabajo de Marwin Pita y Cristian Diablito Lara en el mediocampo, los criollos dominaron el juego en el inicio y cerca estuvieron de adelantarse en el marcador con disparos de Flavio Caicedo (5 minutos) y Pita (6m), que causaron zozobra a la portería millonaria. Los quiteños tuvieron mejor dinámica en el medio sector y con un juego corto y velocidad llegaron con insistencia al arco de Wílmer Zumba.

Emelec equilibró las acciones en la mitad, pero no tuvo solvencia para llegar con peligro a la valla rival; sin embargo, abrió el marcador a los 41 minutos.

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El debutante uruguayo Nicolás Vignieri aprovechó la falla compartida entre los centrales Javier Chila y Fricson Erazo, la salida, para su primera celebración en el fútbol ecuatoriano.

Pese a que Carrasco dijo que su esquema es “ultraofensivo” su único gol llegó tras un grosero error criollo y luego no volvió a anotar.

En el complemento, los militares presionaron buscando la igualdad y apareció la figura del artillero Juan Luis Anangonó, que en fórmula letal con Pita cambió la historia del juego. Pita centró al área azul para que Anangonó remate abajo y marque el 1-1 al minuto 49.

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El Nacional presionó en campo visitante y otra vez tras un centro de Pita, Anangonó marcó de cabeza (54m) el 2-1 para el triunfo local.

El tanto del atacante representa un hito en Ecuador al ser el número 3.000 en la historia de El Nacional en certámenes de primera división. Los puros criollos son el primer club del país que consiguen ese registro.

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Para los minutos finales, las dos escuadras buscaron el arco contrario, pero más cerca estuvo Emelec, que tras una mala salida de Danny Cabezas (74m) casi iguala, pero la defensa criolla se recuperó, despejó el esférico y deshizo el peligro.

Por último, el delantero Ronnal Campos exigió al golero criollo (86m), quien desvió el remate y el balón se estrelló en el horizontal.