QUITO
.- El "ambiente pesado" que Luis Chiriboga, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), aseguró que existe en el país contra el técnico Reinaldo Rueda se reflejó en el operativo de seguridad que brindaron los miembros del aeropuerto Mariscal Sucre al arribo del estratega y la Tricolor, en los primeros minutos de ayer.

Rueda salió rodeado de cinco agentes de seguridad para prevenir cualquier contratiempo. Con su rostro inalterable se refirió a la "amargura" por no lograr el objetivo de superar la primera ronda del torneo.

Pero sobre su continuidad como adiestrador de Ecuador, Rueda aseveró: "El contrato es claro. Por la respuesta de los jugadores yo quiero seguir".

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Según el caleño, "es normal todo lo que se está viviendo. Se intentó hacer un buen torneo, pero esto se quedó en un partido. Es cuestión de asimilarlo y dejar que pasen las horas para tomar la mejor decisión" porque el "objetivo grande" es el Mundial Brasil 2014.

Ambiente pesado
Y pese a que Chiriboga anticipó que Rueda es "consciente del ambiente pesado" en su contra y que por eso "no tendrá tranquilidad para trabajar", el técnico piensa distinto.

"De nuestra parte está firme la convicción de seguir, el contrato (con Ecuafútbol) es muy claro: habla de la eliminatoria y el Mundial 2014. Creo que ni se nombra a la Copa América en el contrato. Pero si hay otros factores que influyan para que esta situación (no se cumpla), bueno", indicó el estratega.

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Por ahora Rueda dijo que en su agenda solo consta la entrega de un informe detallado de la participación de la Selección y que cumplirá en los días siguientes ante el directorio de Ecuafútbol, y una reunión con el presidente de la institución, Luis Chiriboga, con quien adelantó conversaciones en Argentina. "Nos reunimos para conversar y se fijó una reunión para la próxima semana".

Dos razones
Rueda comentó que es difícil determinar qué factores originaron el bajo nivel de Ecuador en Argentina 2011, pero estima que hay dos puntos fundamentales: "un grupo cerrado, enfrentábamos a dos selecciones mundialistas (Brasil y Paraguay) y a una Venezuela que ha crecido mucho". Además "perdimos a Antonio (Valencia), (Luis) Saritama y Jaime Ayoví; Felipe (Caicedo) llegó con varios días de para, todo eso nos resintió. Fortalecimos la parte defensiva, pero nos desequilibramos en ofensiva. Eso no nos permitió conseguir los resultados en un grupo difícil".