Álex Aguinaga no lo niega. Además de haber sido un ídolo del Deportivo Quito, fue su hincha acérrimo y aún guarda sentimientos de admiración y respeto hacia su exclub, al que hoy volverá a enfrentar (ya lo hizo en el 2004 cuando jugó en Liga de Quito), pero esta vez lo hará como entrenador de Barcelona, en la capital, desde las 11:30.