Jaime Freire
.- La huella digital de cada usuario de internet ya dejó de ser un mito. Cada byte de información que se genera en la red queda archivado en algún servidor y puede ser leído por miles de millones de personas alrededor del mundo. Basta con abrir algún buscador, ingresar un nombre para darse cuenta de la cantidad de información disponible que hay sobre las personas en la red.