El Tanque sonríe y asegura que está bien aceitado, que la oxidación es cosa del pasado, que él es un arma ofensiva del presente y que está listo para seguir disparando goles, pese a sus 41 años. Por eso, Eduardo Hurtado se olvidó del retiro y hoy vuelve al fútbol profesional con la intención de seguir batallando.