Una emocionante multitud sin precedentes le dio ayer un apoteósico   recibimiento a los jugadores del Barcelona por las principales arterias de la ciudad, en un recorrido que unió el puerto con el estadio Camp Nou, donde terminó la fiesta, con música y fuegos artificiales, ante más de 90.000 personas.

Centenares de miles de barceloneses se lanzaron a las calles con algo azul y grana en sus cuerpos; con bocinas y bufandas, rostros pintados, para dar un recibimiento multitudinario y caluroso a los futbolistas que volvían de Roma con el trofeo de la Liga de Campeones en sus manos, tras derrotar al Manchester United (2-0).

Precedidos por una guardia a caballo, los gladiadores de Pep Guardiola iniciaron su desfile desde las Atarazanas (un conjunto arquitectónico civil gótico situado en la zona marítima de la ciudad y que se comenzó a construir a finales del siglo XIII) en un autobús con los colores blaugranas.

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“¡Campeones, campeones, olé, olé, olé!”, “¡Barça, Barça, Barça!, “¡Copa, Liga y Champions!”, fueron algunos de los lemas gritados por los seguidores al paso del autobús descubierto que era escoltado por otro, con una orquesta con ritmo, chicos y chicas bailando.

Visiblemente emocionados, Carles Puyol, Samuel Eto’o y Gerard Piqué respondieron a los saludos y gritos de una multitud enfervorizada que coreaba  los nombres de los jugadores, mientras agitaban algunos banderines o bufandas en una estatua abarrotada de jóvenes.

En medio de toda esta locura, Josep Guardiola, con una sonrisa, en un discreto segundo plano. Otros, como Andrés Iniesta, dejaron a un lado su timidez para darse un merecido baño de masas. El golero Víctor Valdés se abrazaba con Xavi Hernández, que no podía creer lo que estaba viendo y Eto’o disfrutaba de lo lindo junto a Thierry Henry, mientras que Lionel Messi lucía divertido un gorro de la Guardia Urbana que le prestó uno de los agentes.

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Luego, en el Camp Nou, los jugadores fueron entrando de uno en uno, cerrando el desfile  Puyol e Iniesta con la Copa del Rey, Xavi y Víctor Valdés, con la del torneo español y Guardiola y su asistente Tito Vilanova con el tercer trofeo, el de la Liga de Campeones de Europa.

“Aquí están las tres, pero vamos a seguir. Muchas gracias. Viva el Barça, viva Cataluña”, dijo Messi y estalló la ovación.

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Detalles: Azulgranas
No hizo comparaciones
El mítico Johan Cruyff evitó comparar al nuevo campeón de Europa con el Dream Team que dirigió. “Este Barcelona juega perfectamente bien. Al público le gusta el fútbol que demuestra. Hay que disfrutar al de hoy y recordar al otro, que tuvo también una época muy buena”, dijo ayer.

Se lo debe a su técnico
El francés Thierry Henry afirmó que soñaba con ganar la Champions desde hace mucho. “Finalmente lo hice”, señaló el galo, que perdió la final del 2006 cuando jugaba en el Arsenal, contra el Barça. “Estuve esperando mucho este momento. Se lo debo a Guardiola, él me convenció de quedarme en el club”, reveló.