El fiscal de Asuntos Indígenas en Cotopaxi, Vicente Tibán, recuerda que hace unos seis meses en la parroquia Zumbahua una mujer acusada de adulterio tras ser reincidente fue expulsada con su amante de por vida de la comunidad. “Ni los castigos, los baños de ortiga, ni consejos dieron resultados”, dice.