Como ocurre con los seres humanos que por el apresurado y malintencionado juicio de sus semejantes son víctimas de estigmas y   marginaciones, la antigua plaza también llamada Parque de la Victoria y en décadas atrás parque Abdón Calderón aún soporta una ‘mala fama’ impuesta por el común de las gentes o quizás porque tiempo atrás algunas personas  lo convirtieron en centro de sus actividades non sanctas.