Para estar enterado del acontecer político ecuatoriano, una de mis fuentes de información fue el sitio web Periodismo de investigación, fundado por Fernando Villavicencio y puesta nuevamente en actividad por sus tenaces hijas, tras el asesinato de su padre. Nos brindaron recientemente un diálogo con la que fue esposa del héroe del Cenepa general Jorge Gabela, Patricia Ochoa. Escuchar nuevamente que el Estado ecuatoriano ha sido cómplice de la muerte del general, que no se señale a quienes ordenaron su asesinato y que no se castigue a los encubridores, me llenó de indignación.

Contrato para investigar el crimen de Jorge Gabela se firmó en el 2013 por $ 78.000 y deja tres sancionados por la desaparición del informe final

Es necesario recordar que los asesinatos del general Jorge Gabela y de los periodistas Fernando Villavicencio y Fausto Valdivieso tuvieron aspectos comunes entre ellos. Los tres casos fueron precedidos por amenazas de muerte y posterior a sus trágicos decesos, elucubrar sombras sobre sus trayectorias y las de sus familiares.

No hay duda de que hace rato los corruptos cuando se sienten afectados por investigaciones se valen de gente sin escrúpulos, para silenciar a quienes se interponen en su camino.

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Señor presidente, Daniel Noboa, y autoridades de la Fiscalía, escuchen la entrevista de la valerosa Patricia y promuevan las diligencias para que esos casos no queden impunes y se sancione a los que tramaron, ejecutaron y encubrieron los asesinatos. Además, a todos los funcionarios estatales que encubrieron las investigaciones, que la justicia los alcance. Caso contrario, el Estado pagará algún día, si lo demandan. (O)

Jorge William Tigrero Quimí, economista, Guayaquil