Daniel Noboa fracciona silenciosamente al movimiento indígena de la Conaie atrayendo a sus líderes

En su primer trimestre en funciones, el presidente Daniel Noboa Azín enrumbó acciones que pasaron desapercibidas, pero que han sido una sacudida para un sector del movimiento indígena congregado en la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).

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Lo que sería una estrategia de Daniel Noboa ha sido la de atraer a ciertos líderes indígenas hacia sus filas e ignora los reclamos y provocaciones que lanza el presidente de la Conaie, Leonidas Iza.

Un hecho fue el de la designación de Marco Guatemal Anrango como titular de la Secretaría de Gestión y Desarrollo de Pueblos y Nacionalidades, que es parte de la estructura de la Función Ejecutiva.

Guatemal ha sido un activo líder indígena de la Conaie e incluso se disputó la presidencia en el 2021 con Leonidas Iza; en las elecciones seccionales de febrero de 2023 fue candidato a prefecto de Imbabura por el movimiento político Pachakutik (PK), brazo electoral de la Confederación.

PK proclamó que las decisiones de Guatemal son individuales y no del movimiento, de igual forma reaccionó la Conaie que dio la razón a un interés del régimen en dividirlos.

«Esta acción busca debilitar la unidad del movimiento indígena en un momento crucial donde nos encontramos en firme oposición a las políticas antipopulares del Gobierno», se apuntó en un comunicado del 8 de febrero de 2024.

Días después, el jefe de Estado viajó a Estados Unidos y Canadá para concretar inversiones. Principalmente, en el área de la explotación minera.

La comitiva que lo acompañó estuvo compuesta por la canciller, Gabriela Sommerfeld Rosero; el secretario de Administración Pública, Arturo Félix Wong y dos oficiales de la seguridad presidencial.

Pero en Otawa (Canadá) se encontró con David Tankamash, presidente de la Federación Interprovincial de Centros Shuar (Ficsh), que es parte de la Conaie y están asentados en Morona Santiago.

En el marco de la Convención Anual de la Asociación de Exploradores y Desarrolladores de Canadá (PDAC), Noboa recibió de Angelina Tsuink, un collar shuar de una organización comunitaria Warints y Yawi, acto que acompañó Tankamash.

Estos sucesos indignaron a líderes amazónicos de Morona Santiago que, en una declaración de prensa, lo desautorizaron.

Felipe Mashiant, presidente de la Nación Shuar del Ecuador (Nashe), delató a David Tankamash de haberse embarcado en el viaje presidencial sin la autorización de los dirigentes y menos para representarlos insinuando que se consultó a las comunidades para firmar acuerdos en inversión minera por $ 4.800 millones.

«Desconozco totalmente a David Tankamash. Los presidentes de las organizaciones no hemos autorizado que él esté viajando, haciendo firmas y acuerdos con empresas mineras para explotar el territorio amazónico. Él no es el único representante. Hay organizaciones que tenemos títulos globales de las tierras y la Fisch debe respetar», reclamó el dirigente.

Añadió que Tankamash no puede hablar por los habitantes del pueblo shuar y rechazan que el Gobierno esté recibiendo $ 4.000 millones de Canadá, “dando paso a 249 concesiones mineras a gran escala en nuestros territorios. Eso no está permitido. Si esto sucede, que una empresa minera llegue a nuestros territorios, armaremos una movilización y seguiremos luchando”.

En esta coyuntura, con sorpresa se enteraron de que la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía (Confeniae) solicitó al Consejo Nacional Electoral (CNE) ser calificados para hacer campaña política por el sí a las once preguntas de la consulta popular y referéndum del 21 de abril, propuestas por Daniel Noboa y el expresidente Guillermo Lasso.

La Confeniae es una filial de la Conaie y miembro activa en las protestas antigubernamentales, aunque en esta ocasión, José Esach Puenchir, representante legal y presidente de la agrupación, había hecho esta solicitud, aunque el CNE lo rechazó porque incumplía uno de los requisitos.

Esto ocurrió, pese a que la Conaie mantiene una postura por el no y tildan de ser una “consulta mañosa”.

Leonidas Iza contó, el 6 de marzo, que había consultado a Esach sobre esto y la respuesta había sido que “inscribieron al medio de comunicación comunitario de la Confeniae para acceder a pauta sobre la consulta popular”.

Pero, sobre la solicitud de inscripción para hacer campaña es algo que investigarán, dijo Iza y exigió a los demás dirigentes de la agrupación tomar medidas.

En esta última semana hubo tensión. En las parroquias Las Pampas y Palo Quemado, del cantón Sigchos en Cotopaxi, se produjeron enfrentamientos entre habitantes que se oponen a la minería.

En un video publicado en redes sociales, Iza llamó a las organizaciones de base a estar unidos para “tener la fuerza y enfrentar una lucha en los territorios si el Gobierno nacional sigue insistiendo. En este país no hay cabida para la minería, no son territorios desérticos”, advirtió.

Ellos han decidido defender a los territorios y denunciaron la formación de una fuerza de choque integrada por “paramilitares y miembros de las Fuerzas Armadas” para amedrentar a los habitantes.

El Gobierno, a través del Ministerio del Ambiente, respondió que lo que se está haciendo es entregar convocatorias para hacer la consulta ambiental antes de las fases de explotación y beneficio de minerales en la concesión La Plata.

Iza responsabilizó a Daniel Noboa de tener una posición hostil en contra de los pueblos indígenas por buscar inversiones mineras y lo exhortó a demostrar si es un “absoluto oportunista o un demócrata”, por señalar que pedirán a la Corte Constitucional (CC) una mora para cerrar el campo petrolero en Yasuní ITT.

A esos señalamientos no hay réplica desde el Palacio de Gobierno.

Para el analista político Juan Manuel Fuertes el movimiento se estaría fragmentando por la falta de una línea ideológica y doctrinaria.

Ello afecta porque las decisiones que se toman son para intereses puntuales de algunos liderazgos y facciones, que es común en todas las organizaciones sociales y políticas.

Pero, “en el caso de la Conaie, desde la presidencia de Leonidas Iza, ha conllevado a más dificultades por su concepción alineada al indoamericanismo que lo promovía el ‘mariateguismo’ (corriente del pensador peruano José Carlos Mariátegui) y lo hace una persona radical, que no todos los dirigentes coinciden con él, con un estilo autoritario y que genera fricciones a la interna”.

Fuertes recordó que el paro indígena de junio de 2022 que se dio en el gobierno de Guillermo Lasso se descontroló tras haber detenido a Iza. De lo contrario, los 18 días de paralización del país no habrían ocurrido.

Daniel Noboa, él corre otra suerte, afortunada quizás, pues lo rodean hechos como la inseguridad ciudadana, la alianza con el movimiento correísta de la Revolución Ciudadana (RC) que estarían evitando estos conatos antigubernamentales.

«El presidente es un actor político con muchísima suerte y parte de esa suerte, que puede resultar paradójico, es esta crisis de la delincuencia, que le coloca a la gente en una posición de priorizar la seguridad. Además, si algún sector trata de amenazar con medidas de hecho, sería muy difícil que genere simpatía, porque Noboa tiene una cifra altísima en credibilidad y aceptación por movilizar a las Fuerzas Armadas contra la delincuencia”, opinó.

Es así como, según Fuertes, factores como la división interna en el movimiento y la condición emocional de la población le facilitan al Gobierno “mantener aislada y controlada” una arremetida.

A lo que se suma, el acuerdo político con el correísmo que tiene entre sus filas a dos asambleístas: Eustaquio Tuala, líder del Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicas del Ecuador (Feine) y Margarita Arotingo, de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), que también tienen presencia en el país.

Estos temas serán parte de un análisis de la Conaie en su consejo ampliado que tendrán este viernes, 15 de marzo, en Conocoto. Los temas por tratar son la coyuntura política y económica; y, tomar decisiones sobre la consulta popular y el extractivismo, el incremento del impuesto al valor agregado, la agenda legislativa, la eliminación de los subsidios a los combustibles, la problemática del agua. (I)